¿Una moda o una salvación? ¿Sirve para adelgazar? ¿Es el único tratamiento posible? Te presentamos los 5 hechos y los 5 mitos más importantes sobre la dieta sin gluten.
Conozcamos los hechos
El gluten es una proteína vegetal que se encuentra en el trigo, la cebada, el centeno y la avena. No es necesario en absoluto para nuestro cuerpo, y por desgracia puede perjudicarnos.
La dieta sin gluten es el único tratamiento eficaz para las personas que sufren intolerancia al gluten y consiste en eliminar por completo los productos con gluten de la dieta. Solo seguir estrictamente la dieta sin gluten permite recuperar la salud al completo.
No te puedes permitir ninguna excepción, ya que hasta las cantidades residuales (una cucharadita, una pizca o incluso un solo bocado) son perjudiciales. Comer productos con gluten «de Pascuas a Ramos» puede provocar problemas de salud durante varias semanas e incluso meses.
La hipersensibilidad al gluten es una enfermedad que afecta principalmente a las personas adultas. Se caracteriza por causar uno o varios de los siguientes síntomas: dolor abdominal, meteorismo, diarreas molestas, erupciones, dolor de cabeza, sensación de cansancio crónico y debilidad.
Los productos más seguros son los productos naturales no procesados sin gluten: todas las frutas y verduras, carne, pescado, leche, huevos, frutos secos, patatas, arroz, maíz, trigo sarraceno, mijo, soja, amaranto, tapioca, mandioca, quinoa, alubias, lentejas, sagú y sorgo.
En la dieta sin gluten, los siguientes alimentos están prohibidos:
- trigo (espelta incluida), cebada, centeno y avena común
- pan de maíz
- cereales no marcados con la espiga tachada
- levadura química, azúcar de vainilla, algunos aromas alimentarios
- frutas desecadas
- frutas y verduras congeladas y enlatadas
- vinagre de alcohol, mostaza, kétchup, mayonesa, salsa para mojar, mezclas de especias
- pastillas de caldo, salsas, sopas de sobre y sopas tradicionales hechas a partir de fermento
- pescado en lata
- yogures, helados
- mantequilla de cacahuete, patatas fritas de bolsa, chocolate líquido, cacao, café y té instantáneo
- vodkas de sabores, cerveza
- obleas
- algunos fármacos, productos vitamínicos y suplementos para adelgazar
Desmontemos los mitos
La celiaquía no es una alergia alimentaria. La celiaquía es una enfermedad autoinmune genética que dura toda la vida. Por culpa de la actividad tóxica del gluten, se altera la absorción de los nutrientes de los alimentos, lo que provoca numerosos síntomas.
La celiaquía y la hipersensibilidad al gluten no son lo mismo. La hipersensibilidad al gluten son los casos de intolerancia al gluten en los que se han descartado la celiaquía y otras enfermedades mediante pruebas diagnósticas, pero aun así el consumo de gluten genera efectos adversos.
La dieta sin gluten no es buena para todo el mundo. Eliminar el gluten de la dieta solo es importante cuando la razón es una enfermedad.
La dieta sin gluten no adelgaza. El aumento de peso se debe a un exceso de calorías. El gluten en sí mismo no tiene nada que ver. No obstante, obviamente si renuncias a los aperitivos, la comida rápida y el alcohol acabarás bajando algunos kilos.
Los productos sin gluten no son tan sanos como podría parecer. Son productos altamente procesados que contienen azúcar, jarabe de glucosa y espesantes añadidos.
Tampoco hay que volverse loco, pero escucha a tu cuerpo y en caso de dudas, acude a un especialista. Ten en cuenta también que los productos sin gluten son más caros que los que contienen este ingrediente, así que considera esto al planificar tu presupuesto mensual. A veces, los créditos rápidos pueden ser útiles para comprar existencias de productos sin gluten. Así, no tendrás que preocuparte porque te falte algún ingrediente de repente y la tienda de la esquina no tenga productos sin gluten.
Cuerpo solo tenemos uno, así que cuidarlo es la mejor manera de vivir sanos durante mucho tiempo.
