En vista de la importancia que el jamón tiene en la gastronomía española, en algunas épocas del año, como Navidad, es normal que en las casas se tengan grandes cantidades de este exquisito alimento. Ante estas circunstancias, la principal preocupación es qué hacer para que el jamón no se dañe. A continuación, hablaremos de algunos consejos para mantener tu pieza en buen estado y disfrutar de este manjar en todas tus comidas.
Consejos para preservar el jamón en casa sin que pierda sus propiedades
El jamón en España es un plato principal que resalta en la gastronomía por su excelente sabor y sus propiedades nutricionales, ya que se trata de un alimento rico en minerales y con un alto contenido de proteínas que son esenciales para tener una alimentación balanceada.
Una de las principales preguntas que surgen cuando compramos o hemos recibido como regalo una buena pieza de jamón es ¿cómo conservar el jamón en casa? Y este es un aspecto fundamental, del que hablaremos a lo largo de este artículo, para disfrutar de su delicioso sabor y aprovechar todas sus propiedades.
Mantener en buen estado una pieza de jamón no es difícil si contamos con las condiciones apropiadas para su preservación. En primer lugar, debemos recordar que se trata de un alimento que ha pasado por un proceso de curación que toma varios años, por lo que congelarlo es considerado básicamente un sacrilegio.
Los aspectos fundamentales que se deben tomar en cuenta para preservar el jamón es la posición en la que lo ubicamos, ya que lo más recomendable es colgarlo de la pezuña en posición vertical y, la temperatura en la que se mantiene, que debe ser entre los 10°c y los 15°c. Es decir, debe ser ubicado en una estancia en donde no haya muchas variaciones de temperatura y, preferiblemente que no tenga mucha humedad.
Una vez que ha llegado el momento de abrir la pieza, es importante que se corte solo la cantidad exacta que se va a utilizar, ya que cuando el jamón entra en contacto con el aire, comienza un proceso de oxidación natural que hace que se empiece a deteriorar la carne, por lo que una vez cortada se debe consumir en el menor tiempo posible.
Un regalo seguro en el período de Navidad
Más que una comida, el jamón es parte de la cultura de los españoles. Un alimento que identifica su gastronomía y que se encuentra siempre presente en la mesa de los hogares, sobre todo, en el período de Navidad. Los regalos de cestas de navidad con jamón, como los que se encuentran en GaleraRegalos, están presente todos los años, por lo que conocer las formas de conservación apropiada es fundamental para disfrutar al máximo de este delicioso alimento.
Si has recibido unas cuantas piezas, no te preocupes por el hecho de comerlo todos los días. Ya que en cantidades moderadas trae grandes beneficios para la salud. Lo importante es que recuerdes que, al momento de consumirlo, cortes solo la cantidad que van a degustar, tratando de dejar el resto del jamón intacto y, procurando siempre de hacer los cortes proporcionales entre la parte magra y la parte grasa.
El gusto por el jamón es algo que depende de las personas, pero si deseas disfrutar las particularidades de su sabor, lo mejor es acompañarlo con bebidas suaves que no opaquen el gusto propio de la carne. Se trata de un producto ideal para compartir con tus amigos y familiares, así que no te olvides de la tabla de embutidos en tu próxima cena para que entre todos puedan disfrutar de este exquisito manjar.
Propiedades del jamón que benefician nuestra salud
Lo primero que debemos saber es que se trata de un alimento altamente nutritivo que puede adaptarse a todo tipo de dieta. Dentro de la gama de jamones que conocemos, el Ibérico de bellota resulta el más saludable, ya que la sana alimentación del cerdo hace que sus valores nutricionales tengan mayores beneficios para nuestra salud, sin contar que es el más cotizado por aquellos que cuentan con un buen gusto en el paladar.
En el caso del Ibérico de bellota está comprobado que se trata de un producto que es “cardiosaludable”, es decir, gracias a la alimentación sana del cerdo y a la crianza en espacios en los que tienen completa movilidad, la grasa que el animal produce se infiltra en la propia carne, convirtiéndose en un aporte para el colesterol bueno en nuestro sistema.
Junto con los otros tipos de jamones, podemos encontrar que se trata de un producto rico en el grupo de vitaminas B, lo que lo hace un excelente alimento para controlar el estrés y la ansiedad. El proceso de curación al que se someten las patas traseras del cerdo genera un producto final rico en minerales como el sodio, calcio, zinc, hierro, entre otros, lo que resulta en un plato que ayuda a prevenir problemas óseos y a mejorar la capacidad de atención.
Lo mejor es que se trata de un alimento con bajos niveles de hidratos de carbono, ideal para las personas que deben tener un consumo de carbohidratos controlado. El jamón, en definitiva, es un alimento que podemos incluir en nuestra dieta diaria sin que represente un problema para nuestra salud.
Un alimento que se puede incorporar en la nutrición diaria
Gracias a todas las propiedades antes mencionadas, no hay ninguna razón para pensar que no puedes comerte un par de lonchas de jamón cada día. Lo importante es crear una dieta balanceada en la que se incluyan de forma proporcional los otros grupos alimenticios que necesitamos consumir.
Comerlo solo o acompañarlo con un clásico pan con tomate, son tan solo algunas de las formas de las que podemos disfrutar del gusto particular que tanto caracterizan los distintos tipos de jamones. Si tienes una pieza en casa y no quieres perder nada, aprovecha de realizar plato más elaborados a los que puedas agregarle un toque de sabor extra con el ingrediente secreto: el jamón.